Entorno donde se ubicaba el antiguo Monte Viejo. El árbol característico de estas formaciones vegetales era la encina debido a que su hoja perenne y sus fuertes raíces eran idóneas para adaptarse a la escasa humedad de la zona. Su paulatina desaparición, debido principalmente a la tala indiscriminada en siglos pasados para el aprovechamiento de la madera y a la roturación del suelo a gran escala en el s. XX para el uso en agricultura, ha ido dando lugar a la proliferación de otras especies de matorral tipo garriga como el tomillo o el romero. En el actual Monte Viejo la especie arbórea que ahora encontramos es el pino carrasco.